Cristina Fernández designó ayer, con un fuerte respaldo público acompañado de tres decretos que reforzaron esa sensación, a Martín Sabbatella al frente de la Autoridad Federal de Servicios de Comunicación Audiovisual (AFSCA). El ex intendente de Morón promete trabajar contrarreloj para que todos los grupos económicos se ajusten a la Ley de Servicios Audiovisuales antes del 7 de diciembre. La idea es que quien no entre en el proceso de adecuación quede aislado y, en términos futbolísticos, fuera de juego.
Sabbatella abrirá su gestión este martes, cuando se reúna junto con el presidente de la Cámara de Diputados y el de la Cámara de Senadores. Con Julián Domínguez y Amado Boudou conversará acerca de la necesidad de que se active la Comisión Bicameral de seguimiento de la nueva Ley de Medios. Y sobre la importancia de que los sectores de la oposición designen allí a sus representantes, así como también a dos miembros en el directorio de la AFSCA. El oficialismo y la oposición se vienen acusando hace meses porque ninguno de ellos, cuando tuvo la mayoría, convocó a la comisión que debe controlar la aplicación de la norma.
Sabbatella debuta en la AFSCA con la tranquilidad del peso del poder delegado por la presidenta. Cristina Fernández firmó, además del decreto que lo designó, un decreto de “única firma” en el que le da al diputado de Nuevo Encuentro la atribución de ser el único que tomará las decisiones. Además, otra norma decretó un nuevo organigrama para la Administración. Se trata de un esquema diseñado por la mano derecha de Sabbatella en su nueva función: Daniel Larrache, ex secretario de Planeamiento de Morón.
Otra carta de gestión que prepara para los próximos días Sabbatella es la postergada designación del defensor del Público. La ley, que el 10 de octubre cumple tres años, le otorga a los usuarios de radio y televisión el derecho a un representante que defienda sus intereses y sus derechos. El titular de la Defensoría del Público de Servicios de Comunicación Audiovisual ya tenía ayer un nombre, pero nadie lo quería develar.
“Martín, te vas a enfrentar a una dura y noble tarea: la democratización de los medios y terminar la labor de la Ley de Servicios Audiovisuales que el próximo 10 de octubre cumplirá tres años de sancionada”, le dijo ayer la presidenta en un acto en Casa de Gobierno a Sabbatella. Y le avisó: “Vas a sufrir de ahora en más. Desde ahora te convertiste en feo, sucio y malo, y van a ponerte a prueba tergiversando, vas a decir ‘blanco’ y te van a poner ‘negro’.” La presidenta destacó, como ya viene advirtiendo el gobierno con el lanzamiento del spot televisivo que llevó el título “7D”, que el 7 de diciembre es la fecha límite.
En diálogo con Tiempo Argentino, Sabbatella destacó la trascendencia de la fecha. “El 7 de diciembre es la fecha tope, queda absolutamente claro, para el cumplimiento absoluto de la ley. Esa es la fecha tope. Es el plazo máximo. Después del 7, los que no hayan entrado en el proceso de adecuación estarán fuera de la ley y con los plazos vencidos. Ahí la AFSCA tendrá que actuar en consecuencia”, advirtió quien remplazará a Santiago Aragón (que había, a su vez, recibido el puesto de manos de Gabriel Mariotto).
El nuevo titular de la AFSCA sabe también que deberá trabajar contrarreloj para hacer cumplir la ley. El Grupo Clarín no es el único que deberá entregar parte de sus licencias y resignar parte de su oferta de servicios. En todo caso, es el único que, abiertamente, sostiene que el 7 de diciembre no es la fecha en la que debe hacerlo (así como antes interpuso todas las acciones judiciales posibles para postergarlo). Por eso, en el equipo de Sabbatella apuntan los dardos a dejarle en claro a todos los empresarios que deben entrar en proceso de adecuación de la ley. Es decir: que quien tenga que desinvertir, desinvierta y se quede sólo con los medios que la ley le permite en función de evitar posiciones monopólicas o dominantes.
“Para mí es un honor y un orgullo que la presidenta se haya fijado en nosotros para esta tarea. Yo creo profundamente en la aplicación integral de la ley, es una ley a favor de la libertad, de la diversidad, de la pluralidad, que viene a mejorar la calidad de la democracia. Democratiza la palabra”, enfatizó Sabbatella. La presidenta, por su parte, destacó que Sabbatella enfrentó a Néstor Kirchner en las elecciones legislativas de 2009. “Esta es una situación de pluralidad y diversidad en serio”, argumentó.
“El mandato de la presidenta es claro y contundente: hacer cumplir la ley y que no haya excepción de privilegios. Que la ley sea pareja para todos y todas. Una obviedad que es necesario reiterarla para quienes creen que pueden actuar fuera de la ley”, le señaló, por su parte, el flamante titular de la AFSCA a este diario. Sabbatella sabe que para llegar a su nueva oficina recibió muchos apoyos. Que centenares de organizaciones sociales, sindicales, educativas y personalidades de la cultura le van a reclamar que garantice el espectro de medios privados sin fines de lucro. Y que, de momento, los únicos que intentaron frenar su ascenso fueron una diputada del PRO, otra de la Coalición Cívica, otra de Unión por Todos y, previsiblemente, el Grupo Clarín.
Fuente: Tiempo Argentino
