Los adolescentes argentinos se despiertan y se van a dormir chequeando WhatsApp, y les creen m\u00e1s a sus amigos que a las celebridades o a los llamados “usuarios influyentes”. Son dos de las constataciones del estudio “Mitos y verdades sobre los \u2018teens\u2019 argentinos en redes sociales (todo lo que hasta ahora no se conoc\u00eda)”, realizado por la consultora en transformaci\u00f3n digital Findasense, que indag\u00f3 sobre el uso particular que le dan los j\u00f3venes a cada red social, para qu\u00e9 y en qu\u00e9 horarios, entre otras cuestiones.<\/p>\n
“WhatsApp les brinda gratuidad, instantaneidad y privacidad. Creo que la suma de estos factores es lo que potencia su uso. Adem\u00e1s, desde que esa aplicaci\u00f3n permite el mensaje de voz, muchos adolescentes lo utilizan porque encuentran en esa caracter\u00edstica la libertad de decir lo que quieren sin que los interrumpan”, explica Sebasti\u00e1n Garc\u00eda Pad\u00edn, Country Manager de la firma en la Argentina.<\/p>\n
En cualquier caso, la red preferida por los chicos argentinos es YouTube, vista como “un centro de entretenimiento donde buscar videos graciosos y, en menor medida, seguir a youtubers”, flanqueada en el podio por Facebook e Instagram, “con afinidades similares”. De acuerdo al informe, que encuest\u00f3 a 700 adolescentes, estos pueden tener entre seis y diez perfiles abiertos con finalidades diferentes. La Argentina “es el pa\u00eds de la regi\u00f3n donde m\u00e1s chicos de ente 14 y 19 a\u00f1os prefieren Twitter; y donde se observa una tendencia interesante, sobre todo en el segmento de 17 a 19, en Vine”, una aplicaci\u00f3n que sirve para crear y publicar videos cortos de una duraci\u00f3n m\u00e1xima de seis segundos, en forma de “loop” (reproducci\u00f3n continua).<\/p>\n
Twitter, en tanto, es visto como un canal para “hacer catarsis”, seguir a famosos y “stalkear”, es decir, “fisgonear” lo que dicen o hacen otros usuarios. Por su parte, Snapchat es el espacio que se asemeja m\u00e1s “al club” de la vida real ya que “all\u00ed la consigna es diversi\u00f3n” y quienes la usan, la valoran “porque pueden compartir contenido de manera \u00e1gil y divertida”, revelan las conclusiones de la investigaci\u00f3n, aunque el 35% de los chicos no la consideran relevante.<\/p>\n
La investigaci\u00f3n concluy\u00f3 que “el 88% de los chicos de entre 17 y 19 a\u00f1os creen m\u00e1s en sus amigos que en celebridades o usuarios influyentes (influencers), y aun a la hora de recibir una recomendaci\u00f3n, conf\u00edan m\u00e1s en ellos que en una marca. Entre los m\u00e1s j\u00f3venes, de 14 a 16 a\u00f1os, el patr\u00f3n se repite, pero con un 81%, es decir, que otorgan algo m\u00e1s de credibilidad a los personajes famosos”, explica Fern\u00e1ndez Tamames, Managing Partner de la consultora, que extendi\u00f3 la pesquisa a Espa\u00f1a y otros cinco pa\u00edses de Am\u00e9rica Latina (Costa Rica, Colombia, Ecuador, Chile y Per\u00fa). Definitivamente, explican los investigadores en el informe, “los influencers tienen escasa cabida entre los adolescentes argentinos. <\/p>\n
Al 44% del segmento del 17 a 19, no les interesan sus opiniones, y al 32,5% de los m\u00e1s peque\u00f1os, tampoco”. A su vez, un tercio de los consultados afirma que si esos usuarios hacen recomendaciones es porque “ello es parte de su trabajo” y le otorgan “baja credibilidad a sus propuestas sobre marcas pues consideran que lo hacen por dinero”.<\/p>\n
El estudio concluy\u00f3, en consecuencia, que la Argentina es el pa\u00eds “m\u00e1s amiguero”. “Creo que tiene que ver con algo m\u00e1s general, cultural, relacionado con el ser argentino y no espec\u00edficamente con los adolescentes \u2013agrega Garc\u00eda Pad\u00edn\u2013. Los argentinos somos familieros y amigueros, y esa confianza en los miembros de la familia y los amigos es un valor.”<\/p>\n
Otro aspecto de inter\u00e9s que determin\u00f3 el estudio es que la hiperconectividad ha construido para los adolescentes una cotidianeidad en la que lo real y lo virtual se entremezclan. “Es que ya no concebimos la vida sin Internet, y las redes sociales son lo que m\u00e1s tiempo los ocupa, el medio por el cual los adolescentes desarrollan sus v\u00ednculos, manifiestan sus creencias, exhiben lo que les gusta, lo que hacen, y as\u00ed buscan su grupo de pertenencia. En definitiva, antes lo hac\u00edamos en un club o en el colegio; ahora ocurre en las redes sociales. La necesidad es la misma, pero el mensaje ahora se amplifica mucho m\u00e1s”, detalla el consultor.<\/p>\n
“La vida offline es importante, pero tambi\u00e9n el feedback online lo es”, respondieron la mayor\u00eda de los adolescentes argentinos encuestados ante la pregunta “\u00bfQu\u00e9 es m\u00e1s importante para vos?” “Muestran una gran inclinaci\u00f3n por la socializaci\u00f3n, que los invite a salir quien les gusta y compartir con los amigos las fiestas de fin de semana, pero consideran muy importante el feedback, es decir, recibir aprobaci\u00f3n en sus manifestaciones a trav\u00e9s de los likes de Instagram, que valen tanto como los de Facebook”.<\/p>\n
Federico tiene 16 a\u00f1os y vive en Palermo. Usa Facebook pero, sobre todo, WhatsApp. “Es lo primero que reviso, lo tengo mucho m\u00e1s a mano, en el celu; en cambio para entrar a Facebook tengo que usar la computadora.” No puede decir con certeza cu\u00e1ntas horas al d\u00eda est\u00e1 conectado, “quiz\u00e1s entre una y tres”, calcula por lo bajo, pero asegura que prefiere “estar con amigos, porque las redes sociales no pueden remplazar la compa\u00f1\u00eda real, s\u00ed sirven para organizar encuentros, pero si estoy con amigos, en general, no las uso”.<\/p>\n
Seg\u00fan el informe, “un comentario favorable en Facebook o un retuiteo es casi tan relevante como destacarse en una competencia”. Otro resultado que arroja la investigaci\u00f3n es que esa franja de la poblaci\u00f3n tiene “una positiva percepci\u00f3n de s\u00ed mismos m\u00e1s all\u00e1 de lo que opinen (sobre ellos) en las redes”. Para el 80% de los adolescentes encuestados, “el hecho de no tener likes no es motivo para eliminar fotos de sus cuentas “, ya que consideran que “no las eliminan porque lo importante es que les gusten a ellos”. “El 20% restante elimina la foto cuando no tiene likes como feedback”. <\/p>\n
Entre ellos, los que tienen entre 17 y 19 a\u00f1os esperan para borrarla un par de horas, mientras que los de entre 14 y 16 a\u00f1os, “s\u00f3lo 10 minutos”, precisa el informe.<\/p>\n
WHATSAPP PARA EL DESAYUNO<\/strong><\/p>\n Ignacio Vera Guill\u00e9n tiene 18 a\u00f1os, vive en Villa Crespo y usa, como la gran mayor\u00eda de los adolescentes, varias redes sociales al mismo tiempo: WhatsApp, Snapchat, Instagram y Facebook. <\/p>\n Aunque no duda a la hora de elegir una: \u201cLa que m\u00e1s uso es WhatsApp, que adem\u00e1s es la primera que reviso para ver si alguien me escribi\u00f3 durante la noche. Por \u00faltimo reviso Instagram, para enterarme si alguien sali\u00f3 a la noche y para saber qu\u00e9 hicieron.\u201d<\/p>\n Dice que puede manejar todas estas redes a la vez desde su celular o tablet, y si bien prefiere \u201cestar con amigos a usar las redes sociales, la verdad es que siempre se terminan haciendo las dos cosas al mismo tiempo, para comentar algo, mandar una imagen o sacarnos una foto todos juntos\u201d. Est\u00e1 en contacto con las redes sociales desde los once a\u00f1os y no se averg\u00fcenza al afirmar: \u201cEstoy todo el tiempo conectado\u201d.<\/p>\n La hiperconectividad para Nacho tiene muchos beneficios: \u201cPod\u00e9s estar conectado con todos de una manera r\u00e1pida, sin gastar plata por mensajes, y adem\u00e1s te permite mandar fotos, videos, notas de voz, y mucho m\u00e1s. Es todo en uno.\u201d<\/p>\n “PUEDO USARLAS TODAS AL MISMO TIEMPO”<\/strong><\/p>\n “No llevo la cuenta de cu\u00e1ntas horas uso las redes sociales, porque en realidad estoy todo el d\u00eda con el celular.” La respuesta de Paula Sanseverino es terminante. Podr\u00eda decirse que esta jovencita es una chica online. Tiene 17 a\u00f1os y prefiere usar redes sociales como WhatsApp, Instagram y Snapchat, aunque tambi\u00e9n usa Facebook, Twitter y Phhhoto. La primera que mira al despertar es WhatsApp y la \u00faltima, antes de meterse de nuevo en la cama, es Instagram, “porque a la noche la gente no sube muchas fotos”, asegura.<\/p>\n Dice que puede con todas a la vez, como la mayor\u00eda de los pibes de su edad, pero que prefiere estar con amigos a pasar horas y horas us\u00e1ndolas. Sin embargo, las redes sociales se atraviesan en su camino indefectiblemente, por ejemplo, en una reuni\u00f3n, y entonces las usa “para subir fotos y para compartir que estoy con mis amigos”.<\/p>\n Ducha en redes sociales desde los 12 a\u00f1os, las navega en su tel\u00e9fono celular y en la computadora de su casa, y puesta a explicar su utilidad, privilegia el v\u00ednculo con sus amigos y el concepto de inmediatez, porque, dice, “me puedo comunicar r\u00e1pidamente y al instante recibo respuestas”.<\/p>\n UN USO PARA CADA RED<\/strong><\/p>\n Seg\u00fan el an\u00e1lisis de Findasense, los adolescentes argentinos: La Argentina es el pa\u00eds donde m\u00e1s teens prefieren Twitter, y dan especial relevancia a recibir un retuiteo.<\/p>\n Facebook es la red donde pueden explayarse.
\n\u00b7 Se despiertan y acuestan chequeando WhatsApp.
\n\u00b7 Pueden tener entre seis y diez perfiles abiertos a un tiempo.
\n\u00b7 Son los que m\u00e1s descreen de celebrities, famosos e influencers.
\n\u00b7 Ante la duda, los chicos ya no preguntan a familiares. Todo lo buscan en Google.
\n\u00b7 YouTube es la red preferida, seguida de cerca por Facebook e Instagram.<\/p>\n
\nInstagram, un lugar para lucirse, chusmear y stalkear.
\nY Twitter, un canal para hacer catarsis y seguir a famosos.<\/p>\n